Mateo Melendreras García | Atsiame (Ghana)
La Semana Santa, al igual que en España, es una de las celebraciones de mayor relevancia entre la población cristiana de Ghana. Durante estos días se celebran oficios en las que se recuerda la pasion y la muerte de Jesús para, más tarde, celebrar su resurrección.
Durante el día de su resurrección, los creyentes se despiertan a las 4:00 de la mañana, se visten con prendas blancas y salen a las calles de sus pueblos, donde cantan en conjunto esta canción: “Jesus rose from the death, hes the king of kings, hes the only one that rose from the dead” (Jesús resucitó de la muerte, es el rey de reyes, es el único que resucitó de la muerte).
Sobre las 6 de la mañana, los cánticos finalizan y las personas regresan a sus casas para prepararse e ir a misa. No se trata de una misa al uso, sino una repleta de música, canciones y, en general, alegría y entusiasmo. Esta misa comienza a las 7 de la mañana y se alarga hasta las 11, donde a las puertas de las iglesias les espera comida y bebida variada que disfrutan en comunidad. Entre estas comidas se puede encontrar arroz, fufu, yam, pollo…
De manera externa a la iglesia y abierto a toda la comunidad, se realizan diferentes actividades bajo el nombre de EasterFest. (Festival de Pascua). Estas actividades se anuncian anteriormente a su celebración por medio de carteles, creando un programa de eventos de 5 días.
Centrándonos en las actividades de este año, comenzamos con un primer día dirigido a la limpieza general del pueblo, para limpiar las malas hierbas y residuos alrededor de la comunidad. El segundo día comenzó con un “Health walk” (“paseo saludable”) que consiste en ir de Atsiame a Heluvi, y de Heluvi a Abor acompañados de tambores, cantos y bailes para, después, regresar a Atsiame de la misma manera. Por la tarde, se realizó un concurso entre los jóvenes de Atsiame en el que había preguntas de conocimiento general (inglés, matemáticas, ciencias sociales, acontecimientos recientes…), una manera de reforzar y hacer más lúdica la educación.
Durante el tercer día se realizaron actividades musicales por horas y en su mayoría se basaban en percusión, acompañadas de cantos y bailes por el resto de la comunidad. Tras esto, llegamos al día dedicado al deporte y las competiciones, donde se realizan juegos tradicionales para los más pequeños (carreras de sacos, carrera con cuchara…), y competiciones de fútbol, voleibol y tirar de la soga para los jóvenes y adultos. En estas competiciones se forman diferentes equipos, como jóvenes contra mayores, casados contra solteros o, en recientes años, voluntarios de España contra locales.
Finalmente, los últimos días se dedican a los bailes y canciones tradicionales. Como se puede observar, la música, cánticos y bailes son algo presente en todo tipo de celebraciones ghanesas. El baile es parte de la cultura ghanesa, y las personas se sienten de una manera única y especial cuando lo hacen. Los bailes tradicionales se comparten de generación en generación, y se encuentran presentes en todo tipo de eventos y celebraciones.
Los bailes son clasificados por géneros, aunque en su mayoría la importancia recae sobre la mujer, que tienen bailes únicamente para ellas. Los hombres también pueden unirse a estos, pero no resulta muy común. Algunos de estos bailes son propios de Atsiame, por lo que no se repiten en otras comunidades.
Para escoger quienes van a bailar en los días del EasterFest, se practica durante una semana antes y serán las mujeres con más experiencia dentro del grupo de baile quienes deciden quien está preparado para bailar y quien no.
Adentrándonos en las letras que acompañan a las danzas, nos hablan sobre la paz y la unidad, siendo canciones que narran que “unidos nos mantenemos pero si nos dividimos todos caemos, por lo que debemos estar unidos para que haya justicia y para ganar la corona como comunidad”. Otras canciones dicen que “los mejores son aquellos que trabajan duro, puesto que alcanzan todo lo que persiguen y tienen una vida exitosa, mientras que las personas perezosas no consiguen nada de lo que se proponen”.
Uno de los bailes más destacables es una danza llamada “kete” en ewe, una coreografía en la que se forma un gran círculo de personas, que irán entrando y saliendo del mismo a lo largo de la actuación. Este gran círculo representa el planeta que habitamos, y cada uno de los participantes es concebido como un país, siendo un baile que nos habla de tolerar a todas las personas y de mantenernos en paz. Es una danza que brinda por la unidad, el disfrute y la cooperación.
Todas las danzas se acompañan por percusión en vivo, y algunos de los instrumentos que se utilizan son los tambores, bongos, cajas, palmadas, dawuro/gongon (campana metálica doble), o axatse (similar a un sonajero). De la misma forma, también se utilizan ropajes especiales en estos, que combinan diferentes telas con estampaciones y motivos africanos tradicionales. Cuando los bailes se realizan en pareja, se trata de que la pareja lleve las mismas telas, por dar mayor unidas y coherencia al mismo.
En términos generales, se trata de una celebración de gran importancia para los cristianos pero que también brinda vida y felicidad para la comunidad en todo su conjunto. A través de estas actividades, la fe, salud y educación se unen y refuerzan a través de acciones que, lejos de ser formales o aburridas, mantienen activa a la población de Atsiame y con ganas por la llegada del próximo EasterFest.
Mateo Melendreras García es estudiante de 3º curso del grado de Publicidad y Relaciones Públicas de la Facultad de Ciencias Sociales, Jurídical y de la Comunicación de la Universidad de Valladolid (España).
Interesantísimo reportaje!