Laura Cenalmor Sánchez | Atsiame (Ghana)
Ghana es un país del noreste de África cuya naturaleza brinda un inmenso abanico de posibilidades de producción. Según la entidad Oxfam International, ese país es actualmente la segunda mayor economía de África occidental. Por lo tanto, en las últimas décadas, se han podido apreciar grandes avances en cuanto a la lucha contra la pobreza. No en vano, ocupa el puesto 140 de los 189 países incluidos en el Índice de Desarrollo Humano (IDH) del Programa de las Naciones Unidas para el Desarrollo (PNUD).
En cambio, aún existen desigualdades. Los habitantes de este lugar, cuya deuda percápita es de 1974€ por habitante, suelen tener dificultades para conseguir materias primas u otros elementos de la vida cotidiana. Por lo tanto, ¿cuáles son las razones que podrían explicar estas contradicciones?
Safo Mawuko es el director de la ONG Denyigba Lorlor Foundation, una entidad ghanesa que trabaja con la comunidad local en iniciativas culturales y de reforestación. Además, Mawuko trabaja con esta ONG, ADEPU, como coordinador de los estudiantes en prácticas que acuden a Atsiame. Gracias a su trayectoria personal y profesional, ha podido reconocer que la pobreza en Ghana es real. “Para nosotros es una tradición tener que luchar para conseguir algo. Cuando las cosas son demasiado fáciles, incluso nos sorprendemos”, dice el director de Denyiba Lorlor Foundation.
Para Mawuko, la clave del problema ghanés reside en la falta de aprovechamiento de los recursos naturales que el país ofrece. Uno de los ejemplos que expone es el agua, ya que Ghana posee uno de los mayores depósitos de agua creados por el hombre a nivel mundial. Sin embargo, los habitantes de este territorio tienen serios problemas para conseguir este recurso. Además, según una investigación realizada por la entidad WeAreWater, el 70% de las enfermedades de este país son causadas por la polución hídrica.
Otra de las contradicciones analizadas es el caso de las carreteras. Según el director de Denyigba Lorlor Foundation, muchas de las vías que se encuentran en las grandes ciudades de Ghana no están en las condiciones adecuadas para ser utilizadas. Paradójicamente, este país posee una de las mayores canteras de piedra del mundo; aunque esa materia prima es mayoritariamente exportada a Reino Unido.
El algodón conforma también una de las materias que preocupan en el territorio ghanés. “Cuando acudes a alguno de nuestros colegios, como por ejemplo, al de Atsiame-Heluvi, se puede observar cómo los uniformes del alumnado están rotos o desgastados”, apunta Mawuko, mientras añade que “esto podría arreglarse fácilmente”. Algunos lugares tanto del norte como del centro del país poseen la climatología y las condiciones naturales óptimas para generar una gran cantidad de algodón de buena calidad. Aún así, no son aprovechadas ya que ese producto es importado desde otros lugares, como China.
Estas son algunas de las razones por las que, según Safo Mawuko, existe pobreza en Ghana. Además, no duda en hablar sobre la actitud de los habitantes ante esta situación. “Estamos enfermos, pero la enfermedad no es el problema. El verdadero problema es que evitamos aceptar esa enfermedad”, sentencia.
Otro de los habitantes de Atsiame cuya opinión sobre la pobreza es relevante es Drikunu Gbexo, uno de los líderes de esta comunidad. Afirma que la clave de la pobreza en este territorio es la agricultura. «La mayoría de las personas en Atsiame viven de lo que la tierra les ofrece», apunta, mientras añade que «otros lugares tienen un huerto de irrigación, pero aquí se depende de la naturaleza y de la lluvia«.
En conclusión, para el coordinador de proyectos de la ONGd ADEPU, el mayor problema de Ghana reside en la falta de producción propia. La globalización es, bajo su punto de vista, el fenómeno que rompe con la producción nativa y abre paso a la importación, lo que hace más difícil a las personas locales encontrar trabajo. Además, según Drikunu Gbexo, esa mínima producción propia se ve limitada por la dependencia hacia la climatología.
Laura Cenalmor Sánchez es estudiante de 4º curso del grado de Periodismo de la Facultad de Filosofía y Letras de la Universidad de Valladolid (España).
Muy interesante, es cierto que es difícil entender que un país tenga mucha riqueza y que sus habitantes vivan en la pobreza.
A pesar de todo, me encanta ver que hay gente que se interesa y se preocupa por ellos. Un hurra por esos alumnos valientes que van allí y alzan hacen visibles a los invisibles